El cambio de color del pelaje en los mininos es muy frecuente, y no siempre está relacionado con un problema de salud. Conoce las principales razones por las que un gato puede cambiar de color a lo largo de su vida, ¡sigue leyendo!
El color de pelaje los gatos está establecido por genética, pero en algunos casos puede experimentar alteraciones que modificarán su aspecto externo. Puede haber diferentes motivos que provoquen estos cambios, incluso una enfermedad orgánica.
- Edad.
- Estrés.
- Sol.
- Nutrición insuficiente.
- Enfermedades (intestinal, infecciosa, de la piel…).
El cambio del color del pelaje de un gato adulto
Los gatos no acostumbran a cambiar el color del pelaje cuando crecen, solamente se intensifica el tono del pelo o se cambia el pelo cuando pasa de bebé a adulta, aunque siempre mantiene el mismo color genéticamente.
Hay razas que cambian el pelo cuando van creciendo como:
Gato siamés
Estos gatos tienen un gen que produce melanina según su temperatura corporal, por eso cuando nacen el color de su pelaje es blanco, debido a que durante la gestación han mantenido la misma temperatura corporal dentro de la madre.
Cuando nacen este gen se activa y colorea algunas zonas que presentan menos temperatura de la normal, como son las orejas, la coma, la cara y las patitas.
Gato Khano Manee
Esta raza presenta una mancha oscura en la cabeza cuando los gatos acaban de nacer, pero al pasar los meses, esta mancha desaparece y de adultos su pelaje es totalmente blanco.
Gato Ural Rex
Estos gatos nacen teniendo un pelaje de color gris, pero después de la primera muda de pelo van adquiriendo el color definitivo y a los 3-4 meses les empieza a salir un pelaje ondulado característico en esta raza. Aun así, no es hasta los 2 años que el cambio se completa.
Gato anciano
Cuando un gato envejece el pelaje cambia de manera leve su tonalidad y aparecen las canas. Suele notarse más en los gatos con pelaje negro, ya que se vuelven más grisáceos y en los de color naranja, que adquieren un color más amarillento.
Tu gato ha cambiado el color de pelaje debido al estrés
Como ya sabes, los gatos son muy sensibles al estrés, ya que son animales muy rutinarios. Un episodio grave de estrés puede provocar “efluvio telógeno”, es decir, que el color del pelaje de tu gato puede variar, es decir, volverse más pálido o que aparezcan canas, además también de producirse una caída de pelo.
Los veterinarios y las personas expertas en el comportamiento gatuno se encuentran asiduamente ante la situación de gatos que han caído desde una ventana. Es por ello que las caídas de los gatos de una altura mayor a los 7 metros tiene un nombre: el síndrome del gato paracaidista, o síndrome del gato volador.
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Tu gato ha cambiado el color del pelaje por el sol
La radiación solar puede afectar al pelaje de tu gato, sobre todo en su coloración y la estructura. Los gatos adoran tomar el sol y eso hace que baje su tonalidad, es decir, que se aclare el color de su pelaje.
Tu gato ha cambiado el color del pelaje debido a una nutrición insuficiente
Un animal debe consumir las cantidades necesarias de proteínas y todos los nutrientes esenciales. Cuando un gato tiene una dieta insuficiente, desarrolla problemas nutricionales y entre ellas se encuentra la deficiencia de fenilalanina y así el pelo del gato cambia de color.
Este cambio se observa sobre todo en los gatos negros, ya que su pelo se vuelve rojizo por falta de estos nutrientes.
Tu gato ha cambiado el color del pelaje debido a una enfermedad
Cuando un gato que tiene una dieta saludable empieza a tener un tono de pelo anaranjado hay que descartar si tiene algún problema de salud, como podría ser una alternación en el nivel de absorción intestinal. También pueden afectar problemas en el hígado o el páncreas.
La muda de pelo en gatos es un proceso natural, pero si no se toman ciertas precauciones se puede convertir también en uno de sus mayores problemas. Se da principalmente en primavera y otoño, cuando su metabolismo se prepara para afrontar los cambios climáticos que están por llegar en verano e invierno: en primavera se desprenden de parte de su pelo para reponerlo por otros pelos más finos y en otoño, al revés, añadiendo pelo más grueso. De esa manera, soportarán mejor las altas y las bajas temperaturas de las respectivas estaciones. En este artículo te damos las claves de este proceso y algunos aspectos a los que prestar especial atención, así como productos que te ayudarán a que tu pequeño felino supere sin sobresaltos esta etapa.
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